Littlewood no llegó a conocer el actual siglo, creo que las posibilidades de la “ley” que lleva su nombre hoy mínimo se duplicarían porque las redes sociales nos han abierto la puerta a la vida de otras personas y a muchos sucesos. Podemos esperar que sucedan «milagros» regularmente, porque en un mundo con 7 mil millones de personas, la mayoría interconectadas, las probabilidades de un evento “milagroso” son bastante buenas. Es decir, podemos esperar sucesos extraños con relativa frecuencia. Otro punto de vista es que precisamente por estar sobreinformados, aunque haya más, dichos eventos nos parecen cada vez menos extraordinarios. Es decir, estamos normalizando cosas que hace unos años nos hubieran parecido muy muy raras.
Quizás por eso en tan poco tiempo se han asumido los absurdos (según la lógica más elemental y cotidiana durante siglos) tipos de interés negativos de la deuda: alguien necesita dinero y yo le pago intereses por quedarme con sus deudas, que eso sea “normal” es de hecho un milagro y aún lo es más que esto no sea algo puntual -como pasó en 2012 con la deuda alemana en plena crisis de la Eurozona- sino cotidiano, Billones de dinero procedente del ahorro de millones de personas se están invirtiendo en esta trampa financiera...
Ejemplos hay muchos, sólo quería hacer este breve post porque si buscáis en Wikipedia sobre eta "ley", la entrada es errónea entre otras cosas porque Littlewood murió en 1977 y no cita a Dyson que fue el que le dio ese nombre, y me parece injusto que al menos mis lectores, no sepan la verdad sobre este curioso pensamiento.
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