Es
evidente que Alemania quiere proteger las inversiones alemanas en el sur de
Europa y no es inocente como nadie es inocente (por supuesto tampoco España y
mucho menos su sistema financiero) pero hay que hacer números.
Los
bancos alemanes tienen menos del 15% de toda la deuda pública española, a
Alemania le resultaría aparentemente mucho más barato no prestar dinero ni a
Grecia, ni a Italia ni a Portugal ni a Irlanda ni a Chipre ni a España y
simplemente ayudar directamente a sus bancos que se vieran afectados por las
suspensiones de pagos (que también afectarían y mucho a la banca francesa y
también a la inglesa por cierto). De hecho, en Alemania eso lo defienden varios
economistas. Evidentemente no lo hace porque una suspensión de pagos de varios
países de la €zona supondría el final de la €zona y al final el coste sería
mayor o al menos eso creen, pero es evidente que todo son intereses económicos,
no se hace por solidaridad ni por amor a Europa.
Pero precisamente
por eso, debemos ser conscientes que si gracias a lo que nos prestan –por el eogismo
alemán o por lo que sea, poco importan las intenciones- no suspende pagos España,
significa que el 65% de deuda que tienen bancos y particulares españoles se
paga y eso es especialmente importante para nuestra economía y porque nuestra
Seguridad Social está invertida en deuda pública española, y eso son nuestras
pensiones…
Así
que siendo pragmáticos, hay 2 opciones: o aceptamos el dinero que nos prestan
con las condiciones que nos ponen (y se intenta negociar que sean las mejores
aprovechando que Italia está en una situación similar y juntos somos más grandes
que Alemania) o no lo aceptamos, el por qué nos lo prestan importa poco, la
cuestión es que hay que decidir si preferimos no suspender pagos de momento y
ganar tiempo o suspender pagos ya.
Por
desgracia, no hay otra opción. Y ese es el debate.
Perfecto analisis!!
ResponderEliminarUn saludo