Si todo fuera tan sencillo como pedir
dinero cuando lo necesitamos y asumir el coste que tiene en ese momento, o
prestárselo al banco cuando nos sobra y aceptar la retribución que nos dé, los
derivados no habrían nacido. Pero los mundos financieros no son tan sencillos e
intentaré poner algunos ejemplos cercanos:
Imaginemos que somos una empresa turronera
que sabe que durante los meses de septiembre, octubre y noviembre necesitará
mucho dinero para poder comprar nueces, almendras, miel etc. y que a su vez sabe
que durante diciembre y enero del año siguiente tendrá un exceso de tesorería
fruto de las ventas navideñas ¿Por qué no puedo presupuestar desde meses antes
lo que me va a costar la financiación y lo que me va a rentar el depósito de mi
liquidez posterior? Para ello la mejor solución es que un banquero, tomando el
precio de los depósitos y con una fórmula muy sencilla que tenga en cuenta el
tiempo, calcule los precios y me ofrezca un precio a futuro con el que
asegurarme -si me interesa- de un cambio brusco en los tipos de interés y así
poder cuadrar mi presupuesto sin sustos.
De ahí, a especular sobre esos precios
teóricos a futuro y usarlos para intentar ganar dinero con la evolución de los
tipos de interés, hay un paso. Pero ese paso no es culpa del producto derivado
que nace de una necesidad empresarial. Los derivados son necesarios para poder
ofrecer coberturas de riesgos de tipo de cambio por ejemplo a las petroleras,
que pueden invertir en libras o en euros de sus países pero acaban siempre
cobrando en $. Otro ejemplo, ¿Cómo podría una empresa de autopistas disponer de
la liquidez para iniciar las obras sin un coste aproximado de lo que le va a
costar esa financiación en comparación a los ingresos de los peajes?
El abuso de los derivados es malo, no hay
duda pero no existían en la crisis del ´29 ni apenas estaban prsentes en el crash
bursátil de 1987, culparlos a ellos de la actual recesión es como echar la
culpa de un asesinato a la pistola en lugar de al asesino.
No hay comentarios:
Publicar un comentario